lunes, 31 de agosto de 2009
Aunque hoy cueste creerlo, la primera actividad que organizaron consistió en proyectar el documental ‘Asecho a la Ilusión’ que refleja como las promesas de progreso y desarrollo económico que hicieron los voceros de Mina Alumbrera y los políticos, nunca se hicieron realidad. Y que, en cambio, la puesta en actividad de la mina trajo como consecuencia un profundo deterioro de la salud de las poblaciones aledañas y de las actividades económicas tradicionales.
Por si esto fuera poco el secretario de la SEGB llegó a actuar de presentador en los debates, y a una de las mesas redondas asistió nuestro señor decano Jorge Aliaga, especialmente invitado por los integrantes del Foro RRNN.
Quien quiera tener más datos puede buscar RRNN en la página web de la Facultad (http://exactas.uba.ar/extension/display.php?estructura=4&desarrollo=0&id_caja=71&nivel_caja=2), allí encontrará dos documentos que resumen las distintas opiniones vertidas en esos debates, mayoritariamente contundentes en contra de la mega minería, salvo un representante de las empresas y un geólogo del SEGEMAR, organismo público cuyo actual presidente es un agente de las grandes empresas mineras.
Para quien no quiera tomarse el trabajo de buscar en la web copiamos abajo algunos párrafos tomados de los documentos elaborados por el foro RRNN, que se encuentran en la página de la SEGB, uno de ellos publicado en el Cable Semanal.
Una vez leído esto nos preguntamos ¿Cómo puede justificar el oficialismo de la Facultad su apoyo a la incorporación de los fondos de YMAD al presupuesto de la UBA (Voto afirmativo de Aliaga, abstención de Pablo Pazos en Consejo Superior). ACEPTAR ESOS FONDOS ES LEGAL PERO NO ES ÉTICO. ¿O Exactas solo está con la Sociedad mientras no haya negocios de por medio?
Entre Todos
Graduados de la FCEN
Cable Semanal 631 (7-11-06) “aun cuando la minería fuera una actividad limpia, controlable y que sus impactos ambientales pudieran mitigarse, no resulta evidente que el desarrollo generado sea sostenible y en beneficio del país”.
Mesa Redonda 25-9-06:
El Dr. Miguel Auge (hidrogeólogo) señaló que la puesta en explotación en los últimos 10 años de grandes proyectos mineros, destinados fundamentalmente al aprovechamiento de oro, ha generado un serio deterioro en la calidad y disponibilidad del agua existente en los yacimientos, o en sus cercanías. En este sentido, destacó que estos yacimientos mineros se sitúan en regiones áridas, donde la precipitación no sobrepasa los 200 mm/año y por ende la recarga subterránea es muy limitada y en algunos casos prácticamente no se produce. …… Enfatizó que la falta de impermeabilización del dique de colas en el yacimiento Bajo La Alumbrera, fue reemplazada por una batería de pozos, cuya finalidad es extraer los contaminantes infiltrados con el lixiviado. Esta práctica no brinda los resultados buscados, pues no se puede extraer toda el agua contaminada y además, cuando se abandone el yacimiento por agotamiento de la reserva metalífera, seguramente también se detendrá el bombeo con la consecuente desaparición de la barrera hidráulica, que actualmente controla, aunque sea en forma parcial, el desplazamiento de la pluma de contaminación en el agua subterránea.
El Lic Fernando Díaz (Geólogo, perito en temas ambientales) explicó los principios que rigen la evaluación de impacto ambiental según la Ley 25.675-Art.4), a saber:
Principio de prevención: Las causas y las fuentes de los problemas ambientales se atenderán en forma prioritaria e integrada, tratando de prevenir los efectos negativos que sobre el ambiente se pueden producir.
Principio precautorio: Cuando haya peligro de daño grave o irreversible la ausencia de información o certeza científica no deberá utilizarse como razón para postergar la adopción de medidas eficaces, en función de los costos, para impedir la degradación del medio ambiente.
Principio de equidad intergeneracional: Los responsables de la protección ambiental deberán velar por el uso y goce apropiado del ambiente por parte de las generaciones presentes y futuras.
Destacó los principales impactos ambientales de la minería, a saber:
Destrucción del paisaje; impacto en el balance hidrológico; drenaje ácido; contaminación de aguas superficiales, subterráneas y sedimentos con metales; sedimentación; cianuro; emisiones aéreas; impactos geodinámicos. Describió el peligro de la liberación de contaminantes a la atmósfera producto de las explosiones principalmente en forma de óxidos de nitrógeno y sulfatos. Dio un ejemplo: un proyecto como el de la minera “El Desquite” en Esquel puede liberar al año 201.864 kg de óxidos de nitrógeno (NOx) y 25.233 kg de dióxido de azufre (SO2).
sábado, 29 de agosto de 2009
Insubordinados a conciencia
a insultar y amedrentar, por un lado, y por el otro una multitud temerosa, que no se anima a asomar la cabeza por miedo a que se la corten. La excepción es la de algún jubilado que ya no tiene nada que perder porque le sacaron todo, y que los pone tan nerviosos porque no se calla de una vez que lo quieren sacar de las listas.
El último episodio es el de la promoción del Prof. Gurtler. Etchenique, que ya no tiene vergüenza que perder, inicia el proceso de linchamiento, acusando a un consejero de graduados de iniciar una vendetta política, 1 contra 9, en el Consejo Directivo, porque “se negó a votar positivamente su ascenso”. Claramente, un acto de insubordinación inadmisible. ¿Cómo alguien puede negarse a votar lo que quieren las autoridades?
A Rober inmediatamente se le agrega Marce, otro obsecuente a la pesca de algún favorcito, que expresa la “vergüenza ajena que le provoco escuchar al consejero Rodriguez Gil votando en contra y así frenando el ascenso a titular del Dr. Gurtler”.
Finalmente, resulta que el Consejero no votó en contra, porque no hubo votación alguna. Eso, que a cualquier mortal le resultaría una mentira, nos aclaran ahora los máximos ideólogos del acomodo, los Dres. Paz y Olabe, no es tal. Digamos que era una manera de simplificar la situación para que la gente no tuviera que pensar mucho, una actividad peligrosa para el poder.
La realidad, citamos textualmente al Dr. Paz es que nuestro consejero “dijo explícitamente que no votaría afirmativamente en esta sesión la promoción de Gurtler ya que tenia "dudas"”. Todos sabemos que tener dudas es un pecado que en la facultad se paga con el linchamiento.
En esta facultad el sistema de Concursos funciona así: los jurados los pone el oficialismo a voluntad. Los veedores los pone el oficialismo a voluntad. El oficialismo controla a voluntad al jurado, por si alguno no cumple "satisfactoriamente" con su “tarea”. Al resto, le queda la obligación de votar afirmativamente, sin permitirse ni siquiera algunas “dudas”. Si alguno tiene dudas después de un mecanismo tan transparente, es claramente un subversivo que debe ser castigado con, al menos, el peso de la opinión pública. Recordemos que se trata de un consejero en un cuerpo de 16, que aún conserva la dignidad de votar según sus convicciones o, como en este
caso, no votar hasta no estar convencido. Muchos consejeros de minoría ni aparecen por el CD, hartos del manoseo y de lo inútil del ritual hebdomadario. Agrupaciones enteras de graduados decidieron abandonar la participación en la política académica, hartos de tanta arbitrariedad.
Pues bien, los consejeros de Entre Todos seguiremos votando con nuestra conciencia, aunque sabemos que eso puede significar ver nuestras carreras demoradas, perder concursos, o hasta algún Juicio Académico. Y que la alternativa, votar lo que se nos ordena, sería muy provechosa para nuestras carreras. Aquellos graduados que quieran tener consejeros de este tipo en el CD, tienen una opción para las próximas elecciones.
Antes de finalizar, nos preguntamos por qué tanto interés en discutir estos temas, y no los que realmente importan. La vergonzosa aceptación de los fondos de la minería contaminante, por ejemplo, o el servir de
pantalla a la intervención al Indec, para citar dos casos recientes. La inestabilidad laboral y los concursos amañados, un problema de toda la vida cada vez más agravado por la soberbia de las autoridades. ¿No será que tanto fuego de artificio es para desviar la atención? ¿Y dónde está Sumatoria, a todo esto, mientras los profesores de ADU hacen campaña para ellos?
Entre Todos
Graduados de la FCEN
Proyecto prórroga por maternidad Agosto - 2009
Por eso, ante la preocupación expresada por el oficialismo de la facultad sobre
declaraciones "machistas" vertidas en las listas de la facultad, y el repentino interés por la situación de las docentes que estas declaraciones despertaron, hemos presentado un proyecto de resolución que propone que se prorroguen por un año los cargos de aquellas docentes que hayan adoptado o dado a luz durante la vigencia de un cargo docente auxiliar. Esperamos que esta resolución sea aprobada en la próxima reunión de comisión, y a la brevedad en el CD.
El texto completo del proyecto de resolución se adjunta al pie.
Entre Todos
Graduados de la FECEN
PROYECTO DE RESOLUCIÓN DEL CONSEJO DIRECTIVO DE LA FACULTAD DE
CIENCIAS EXACTAS Y NATURALES DE LA UNIVERSIDAD DE BUENOS AIRES
VISTO,
El sistema de concursos que rige para las y los trabajadoras y trabajadores docentes e investigadores de la Facultad de Ciencias Exactas Naturales y,
CONSIDERANDO
Que la normativa reglamentaria mencionada no toma en consideración determinadas situaciones fácticas que establecen una distinción irrazonable entre las y los trabajadoras y trabajadores docentes en relación a las trabajadoras que se hallan con licencia por embarazo y/o maternidad al exigirle a las mismas el cumplimiento de determinados deberes profesionales y académicos relativos a la producción científica en el mismo plazo sin evaluar la situación en particular en que se encuentran dichas trabajadoras que hace que se vean impedidas y/o con dificultad de realizar tareas laborales, profesionales, científicas, técnicas y/o académicas durante el tiempo en que se producen las licencias respectivas.
Que de no mediar la evaluación de esta situación diferenciada implica incurrir en actos discriminatorios contra las mujeres, violando así principios de igualdad de derechos y de respeto de la dignidad humana, dificultando la participación de la mujer en las mismas condiciones que el hombre en la vida política, social, económica, laboral, cultural y científica; y que entorpece el pleno desarrollo de las posibilidades de la mujer trabajadora, en este caso docentes y científicas de nuestra Universidad y nuestra Facultad.
Que la máxima participación de la mujer en todas las esferas, en igualdad de condiciones con el hombre es indispensable para el desarrollo pleno de la persona y para el bienestar del pueblo en su conjunto.
Que debe tenerse presente los grandes aportes que hacen las mujeres al desarrollo de la sociedad, hasta ahora no plenamente reconocidos; como así también la importancia social de la maternidad y que esto no debe ser una causa de discriminación, sino que exige una responsabilidad del Estado, los gobiernos y, en este caso, de la Universidad en asegurar la paritaria condición de acceso real de oportunidades.
Que diversas normas constitucionales, nacionales e internacionales del trabajo y de los derechos humanos económicos, sociales y culturales (Convención sobre la eliminación de todas las formas de discriminación contra la mujer, Convenio Nro. 183 sobre la protección de la maternidad – año 2000- Convenio Nro. 156, Recomendación Nro. 95 y la propia Constitución de la OIT en su artículo 22) dan fundamento para definir un tratamiento especial que pueda equiparar a través del trato más favorable situaciones como las mencionadas en los considerando precedentes.
Que, en consecuencia con el párrafo precedente, las normas sustancialmente refieren sobre la responsabilidad de los Estados y sus gobiernos en adoptar todas las medidas apropiadas para eliminar la discriminación contra la mujer en la esfera del empleo y en este sentido garantizar el trabajo, al salario, la estabilidad en el empleo, la aplicación de iguales criterios y la prohibición de discriminación por razones de maternidad, entre otras cuestiones.
Que la Universidad, y en este caso, la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales no debe soslayar la responsabilidad que como institución educativa, pública y social le incumbe, arbitrando todas las medidas conducentes a equiparar los criterios y condiciones de acceso y desarrollo profesional, laboral, académico y científico de las trabajadoras docentes e investigadoras que se hallen bajo licencia por embarazo y/o maternidad,
Que existen precedentes normativos que brindan una solución favorable que atiende a dicha situación y que han sido implementadas en el régimen de concursos y/o carrera docente, como es el caso del reglamento de carrera docente de la Universidad Nacional de Quilmes según Resolución (CS) Nro. 324/05 de la mencionada Universidad que en el Artículo 20 de su Anexo I prescribe: “La evaluación de desempeño de las docentes no se aplicará al año inmediatamente posterior al nacimiento y/o adopción de sus hijos, salvo manifestación expresa en contrario por parte de las interesadas. El reconocimiento de este derecho no comporta modificación alguna en el régimen de licencia por maternidad”.
Por lo que,
El Consejo Directivo de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la Universidad de Buenos Aires
RESUELVE
Artículo 1: Prorrogar automáticamente por un año los cargos de aquellas docentes que hayan adoptado o dado a luz durante la vigencia de un cargo docente auxiliar, cualquiera sea el momento del parto, salvo manifestación expresa en contrario por parte de las interesadas. Otorgar el mismo trato a todas aquellas trabajadoras que estando embarazadas hallan, por cualquiera fuera su causa, tenido fallido la prosecución del embarazo y/o nacimiento.
Artículo 2: Comunicar al Rectorado y el Consejo Superior de la Universidad de Buenos Aires y a los otros organismos oficiales del sistema científico nacional esta resolución y solicitarles que actúen en la misma dirección.
Artículo 3: Comunicar la presente resolución a las Secretarías y Departamentos respectivos, al Centro de Estudiantes, a la Asociación Gremial Docente de Buenos Aires (AGD-UBA) y a la Asociación del Personal No Docente de la Universidad de Buenos Aires (APUBA). Dése amplia difusión de lo resuelto.
Artículo 4: De forma.
viernes, 28 de agosto de 2009
Estabilidad docente, aclaraciones 19-8-09
Fue Etchenique quien defendió el concurso periódico abierto con el argumento de que era "una conquista de la Reforma". Bueno, hemos demostrado que nada tiene que ver la Reforma con el concurso periódico abierto, que defienden a ultranza los integrantes del oficialismo de la FCEN en cualquiera de sus presentaciones: ADU, Sumatoria o Sinergia. Y que el concurso periódico abierto es un invento de la dictadura instaurada por la revolución Libertadora. Es decir, que la frase de Etchenique "la finalización de un cargo por 3 o 7 años (una conquista de la Reforma Universitaria que se llamó en 1918 "Periodicidad de Catedra")" es falsa. Aunque no sabemos si su cita se debe a ignorancia
o deshonestidad.
Así como Gollum, el mítico personaje de Tolkien, se aferraba a su anillo y pasaba sus días enajenado en sus delirios, Etchenique vive abrazado al mito de la excelencia académica y, desde su torre de cristal, nos responde con la primera chicana que le viene a la mente. ¿Para qué tomarse el tiempo de leer los documentos originales si uno es tan inteligente como él, y 10 años después de doctorado ya es Profesor Titular?
Pero la evocación que Etchenique hace de la reforma no se ajusta ni a la veracidad de la historia ni al espíritu de aquellos jóvenes que querían desplazar a las camarillas y dar paso a una Universidad más democrática. Por ejemplo, proponían un único claustro docente, y representación igualitaria entre los claustros, conceptos mucho más
democráticos que el estatuto vigente, el de la Libertadora. No olvidemos que cuando el sector de Aliaga apoyó la elección de Hallú, en deliberaciones rigurosamente custodiadas por la policía (que no se privó de dar palos), nos prometieron reformar el estatuto, promesa que, como era de esperar, no cumplieron.
Otro ejemplo de la técnica que utiliza Etchenique para discutir, es cuando dice que queremos "congelar la nómina de docentes, y que no entre nadie más (y que nadie más ascienda) salvo por renuncia o jubilación de los que ya tienen el cargo". Claramente, lo que busca es provocar un irracional temor en los jóvenes docentes, que nunca más
podrían progresar porque los mediocres quedarían eternizados en sus puestos.
Sin embargo, cualquiera con un poco de voluntad se da cuenta que nuestra propuesta, en realidad, facilita la promoción de los docentes, ya que ésta dependería solamente de la capacidad y el trabajo de cada uno, y no de la "renuncia o jubilación de los que ya tienen el cargo", o de que haya alguien de quien las autoridades quieran deshacerse. Repetimos: con el sistema que proponemos, cada uno asciende según sus propios méritos. Mientras tanto, el oficialismo boicotea las luchas de los docentes y becarios para mejorar sus condiciones de trabajo y sus reclamos de aumento de presupuesto (¡Para que haya más cargos!). Se presentan como los defensores de los jóvenes,
cuando en realidad, no les garantizan sus derechos más elementales.
El sistema, en realidad, existe en la UBA para los profesores, ya que en el concurso de renovación el jurado puede proponer que sea nombrado en un cargo superior. Nos gustaría que el método fuera aplicado para todos, claro, y no como ahora que sólo se usa para los amigos. Un ejemplo lo brinda el CONICET: ahí no hace falta la jubilación o
caida en desgracia de nadie para entrar a la carrera, y mucho menos para ser promovido.
Claro, de este modo se correría el riesgo de tener más Profesores Titulares en la Facultad. Recordemos que hacen falta 8 Titulares para armar una lista de Claustro para el Consejo Directivo. Por lo tanto, cuantos menos Titulares haya, el oficialismo podrá mantener más fácilmente el control absoluto de la Facultad.
Finalizamos con una frase auténtica del Manifiesto Liminar de la Reforma, que está vigente hoy en día, gracias entre otras cosas a la soberbia y autoritarismo del oficialismo (ADU-Sumatoria-Sinergia) de esta facultad:
"Nuestro régimen universitario -aún el más reciente- es anacrónico. Está fundado sobre una especie de derecho divino; el derecho divino deI profesorado universitario. Se crea a sí mismo. En él nace y en él muere. Mantiene un alejamiento olímpico.
Estabilidad docente 2da parte 11/8
Ahora que nos despojamos de prejuicios, podemos analizar las bondades o perjuicios del sistema de concursos abiertos periódicos. Esencialmente, la idea subyacente es que si cada 3 años (docentes auxiliares) o 7 (profesores) se busca el mejor docente/investigador para una cátedra/área, y se lo elije independientemente de que esté o no en el cargo, el sistema mejorará indefinidamente. Resta definir, por supuesto, qué es “mejor”. Parecería que el criterio es quien-tenga-más-papers-en-revistas-internacionales-de-alto-impacto. Al menos en aquellos casos, no muchos, en los que el amiguismo y el clientelismo político no predominan.
Este método sería el equivalente a ir cambiando las lamparitas de una casa, una a una, por otra más luminosa, con la idea de que progresivamente tendremos cada vez más luz. Sin embargo, este concepto no tiene en cuenta que a veces la luz emitida depende no sólo de la calidad de la lamparita sino también de la tensión domiciliaria: ¿quién garantiza que el recién llegado post-doc del MIT que, con financiamiento de primer mundo y sin hacer docencia, producía 3 papers por año, los seguirá produciendo cuando además deba hacer docencia, llenar la categorización de incentivos, pedir la factura que diga “préstamo BID” y llegar a fin de mes con un sueldo miserable? Además, claro, de preocuparse por no perder el laburo ante el próximo recién llegado del MIT.
Por otra parte, cambiar un docente que escribe 2 papers por otro que escribe 2,5 puede significar desmantelar un grupo de investigación, cerrar un laboratorio, dejar becarios o tesistas sin director. ¿Qué hacemos con ellos? Recordemos que la “periodicidad de cátedra” se aplicaba, aún en el concepto de los milicos fusiladores, a facultades que formaban profesionales liberales. ¿Es aplicable a una facultad donde se hace investigación? ¿No corremos el riesgo de destruir en un día de concurso lo que se construyó en 7 años o más de trabajo?
¿Qué tipo de facultad fomenta este sistema? Permítasenos denominarlo una facultad menemista. Una facultad donde todos competimos con todos. Muchos estamos pensando al concurso de renovación de quién nos presentamos, a ver si conseguimos trepar un escalón más (de hecho, quienes se prestan al trabajo de buitres-académicos y andan por la vida moviéndole el piso a sus colegas tienen mayor probabilidad de ingresar y/o progresar que quienes jamás soñarían con soplarle el trabajo a un compañero de oficina). Estamos permanentemente compitiendo entre nosotros, preocupados por la productividad, como quería Cavallo, que ahora se mide en papers. Todos, claro, menos aquellos que se convierten en alcahuetes del poder, y trepan o subsisten gracias a hacer favores a los poderosos. Como los Consejeros de graduados del oficialismo, que tienen una probabilidad de ser nombrados profesores mucho mayor al promedio (y no sólo los graduados, claro).
Nosotros creemos, en cambio, que la investigación y la docencia, como cualquier actividad humana, necesita ser colectiva para ser verdaderamente creativa. Que si en lugar de pensar cómo publicamos más que el prójimo, pensamos cómo producimos más junto con el prójimo, la investigación en la Facultad va a crecer. Que si nos liberamos del fantasma de perder el cargo, vamos a poder producir mejor ciencia. Y que si en lugar de investigar lo publicable en la revista de mayor impacto, con un ojo en el próximo concurso, investigamos lo que tenga más impacto en la sociedad que nos rodea, nuestro trabajo será infinitamente más útil.
Por supuesto, hasta acá prescindimos de un hecho fundamental. Los investigadores y docentes somos, antes que nada, seres humanos. Como tales, tenemos los mismos derechos que los otros seres humanos. Tenemos derecho a la salud, a educar a nuestros hijos, a poder prever el futuro. Tenemos derecho a saber que si cumplimos con nuestra obligación, tendremos asegurado nuestro trabajo. Cuando el oficialismo habla de los derechos de los trabajadores, por supuesto, se olvida del derecho a la estabilidad laboral, a no ser despedido sin justa causa. ¿Defendería Etchenique que se eche a un tornero porque llegó otro “mejor” a la fábrica? ¿Que se eche a un albañil porque hay otro que levanta paredes un poco más rápido? El concepto subyacente en toda esta discusión es que nosotros no somos trabajadores. Sin embargo, con nuestro sueldo comemos y mantenemos nuestras familias, igual que el resto de los trabajadores.
Por último, Etchenique insulta nuestra inteligencia, una vez más, cuando dice: “Pretender que la finalización de un cargo por 3 o 7 años es un despido es parte de la campaña de desinformación y mentiras previa a cada elección de claustros”. En cualquier lugar del mundo, en cualquier rama de la actividad, cuando una persona trabaja en relación de dependencia por 3 o 7 años, y muchas veces más que eso, y no le “renuevan” el contrato, está despedida. El invento del “contrato” es parte del imaginario menemista, y fue utilizado para bajarle costos a los empresarios, a costa de los trabajadores (también es usado así en la FCEN. Según confesó un funcionario de la gestión, las maestras del jardín maternal tienen cargos docentes “porque así las podemos echar más fácil”). Cabe resaltar que 99% de los casos en los que se dejó a docentes en la calle no fue porque "no cumplieron con las tareas", como dice Etchenique. La prueba es que los jurados no dejan a los despedidos fuera del orden de mérito, que sería el modo de decir que no son aptos para el cargo. ¿O no cumplieron, pero sí son aptos?
Finalmente, aclaramos una vez más: no pretendemos que los ñoquis continúen en los cargos sin trabajar. No buscamos “congelar la nómina de docentes, y que no entre nadie más (y que nadie más ascienda)”. Simplemente no creemos que la docencia e investigación universitarias deban ser un sistema de puertas rotatorias, donde hay que echar a unos para meter a otros, que luego serán echados a su vez, a menos que se hagan amigos del poder, en cuyo caso serán favorecidos con concursos truchos.
Sería bueno que en su inevitable respuesta Etchenique deje de atribuirnos conceptos que nunca defendimos. Aunque no somos optimistas al respecto, el escorpión no puede vencer a su naturaleza. Claramente él piensa que los que nos oponemos a su visión sobre el sistema de concursos lo hacemos porque somos mediocres. ¿Creerá además que somos estúpidos?
Si Etchenique está tan preocupado por el ingreso al sistema científico/docente de los “que no tienen cargo porque "llegaron tarde"”, debería luchar por más presupuesto, para más cargos y mejores sueldos, además de muchas otras cosas imprescindibles. Algo que el oficialismo de la facultad se niega a hacer, porque están muy preocupados en quedar bien con el gobierno. Por eso no sólo no apoyan las luchas por mayor presupuesto y mejores sueldos, sino que boicotean a los demás cuando luchan. ¿O no recordamos a Etchenique, cuando la huelga triunfante de 2005, contándonos en las asambleas cómo le alcanzaba el sueldo y lo bien que vivía? ¿O no recordamos los mails del oficialismo, en esa huelga y las que siguieron, llamando a no parar y a no concurrir a las marchas?
Sobre la estabilidad docente 1era Parte -10/8
Dice Etchenique que el sistema de concursos periódicos es “una conquista de la Reforma Universitaria que se llamó en 1918 "Periodicidad de Catedra"”. Esta es una manera poco sutil de decir que quienes ponen en duda las maravillas absolutas del régimen que rige actualmente en nuestra Facultad son trogloditas, que intentan volver al sistema universitario del Siglo XIX. Sin embargo, las cosas no son exactamente como Etchenique nos quiere hacer creer.
En realidad, en la reforma del 18 el concepto de periodicidad no implicaba un concurso abierto periódico, sino simplemente que los cargos debían ser refrendados al cabo de unos años. Es más, no implicaba concurso, ni siquiera al inicio de la designación, ya que ésta podía hacerse simplemente por CD1. Lo que sí había en los proyectos de la Reforma era un único Claustro Docente, sin la separación elitista que existe actualmente. ¿Estará nuestro oficialismo de acuerdo con este concepto básicamente democrático?
Los concursos periódicos (o periodicidad absoluta) son un invento de la dictadura originada en la Revolución Libertadora, introducidos mediante el decreto Ley 6403 de 1956: “las cátedras serán ejercidas por períodos limitados y los plazos y las condiciones serán reglamentados por cada Universidad”. Si quisiéramos devolver la chicana de Etchenique, diríamos que el gorila es él, que defiende una ley de la Fusiladora, y no nosotros. Pero vamos a resistir la tentación.
En realidad, la designación de profesores por períodos limitados es un invento argentino como el dulce de leche, ya que lo que predomina en las universidades del mundo es el “Tenure”, es decir, la designación de por vida. Probablemente será por eso que el sistema científico argentino está tan por encima del de otros países (junto con otras preciosuras también defendidas por el oficialismo de la facultad como los incentivos, los subsidios con plata y condiciones del BID, la CONEAU, el FOMEC, y demás ideas del Banco Mundial heredadas del menemismo).
Pero aún en la Argentina, el sistema que propugnan Etchenique y el oficialismo de Exactas se sustenta en una flexibilización laboral extrema. En Córdoba, por ejemplo, al cabo de 7 o 5 años, según la categoría de la designación por concurso, “el H. Consejo Superior designará un Comité por área que evaluará los méritos académicos y la actividad docente del Profesor ... Cuando el Comité Evaluador considere "satisfactorio" el desempeño propondrá al H. Consejo Superior ... la renovación de la designación como Profesor por un plazo de cinco (5) años”. Si fuera considerado "satisfactorio con observaciones", será designado por dos años, y vuelto a evaluar (http://www.unc.edu.ar/institucional/organizacion/estatutos/profesores). ¿Y el concurso periódico abierto? Bien, gracias.
1 La periodicidad de la reforma
En el momento de la Reforma, la universidad estaba regida por la Ley Avellaneda, vigente entre 1885 y 1947. Esta ley establecía que los profesores universitarios eran nombrados por el Poder Ejecutivo, que elegía entre ternas que elevaban las Universidades, y los periodos de designación eran de aproximadamente 6 años.
¿Qué propusieron los estudiantes reformistas? Que: “El Consejo Directivo de la Facultad votará ... una terna de candidatos ... la cual será pasada al Consejo Superior... Si fuera aprobado se elevará al PEN quien designará de ella al profesor que deba ocupar la cátedra por el período y en las condiciones que determinen los Estatutos”. Además, “Los candidatos serán elegidos por concurso de examen de títulos o de cualquiera otra clase o por dos tercios de los votos del Consejo Directivo”. Es decir, el proyecto de la Reforma continuaba dejando en manos del PEN la designación de los profesores, y para la elección de la terna se podía hacer un concurso de cualquier tipo (?!), o si no, designarlo nomás.
¿Y la periodicidad? “El profesor elegido por el PEN será nombrado por un período de 6 años. Al cabo de ese periodo podrá ser confirmado por otro igual, por dos tercios de los votos del Consejo Directivo y así sucesivamente”. Es decir, que los estudiantes reformistas cuando hablaban de la periodicidad de la cátedra se referían a un sistema en el cual los docentes propuestos eran elevados al PEN, pero una vez que estos eran designados, al término de los 6 años, podían quedar en la cátedra si así lo consideraba el Consejo Directivo. Los dos tercios, cabe aclarar, no constituían mayoría especial, sino que era la misma necesaria para elevar la terna original al PEN. Entonces, como vemos, la periodicidad no implicaba concurso periódico. En realidad, no implicaba concurso, siquiera al inicio de la designación, ya que ésta podía hacerse simplemente por el voto de los dos tercios del CD.
Ambos documentos pueden consultarse en el Cable Semanal de la FCEN:
http://www.fcen.uba.ar/prensa/cable/1998/e-c278b.htm
¡Qué épocas aquellas, en las que los órganos de prensa de la Facultad estaban al servicio de toda la comunidad, y no eran sólo un pasquín de las autoridades!
lunes, 3 de agosto de 2009
Hipocresías del oficialismo de la FCEN - 3-8-09
Violaciones de los derechos laborales de los docentes auxiliares
El Profesor Etchenique y el resto del oficialismo se jactan de ser “progresistas” y a menudo citan frases como la que sigue: “La luchas obreras de principio del siglo XX generaron una serie de normas mas o menos universales, que hoy se aplican en muchisimos paises del mundo(o al menos asi lo obliga la ley). Una de ellas es la conocida "jornada de 8 horas" o de 40 horas semanales. Antes era comun el trabajo "a destajo" o "de sol a sol" como todavia pretenden (y ejecutan) muchos terratentientes con sus peones.” Roberto Etchenique (mail 23/7/2009).
La hipocresía de estas personas los lleva a escamotear del debate algunos de los reclamos históricos por los cuales dieron sus vidas miles de trabajadores desde principios del siglo XX: “la estabilidad laboral” para todo trabajador que realice sus tareas de modo correcto, la “indemnización” en caso de que un trabajador fuese despedido sin causa fundada, y el derecho a la “reincorporación” del trabajador que hubiera sido despedido sin causa justificada.
Aunque parezca increíble, el régimen laboral de los docentes auxiliares de la FCEN-UBA (la mayor proporción de la planta docente), no reconoce ninguno de los derechos mencionados. De hecho, bajo el régimen de concursos abiertos cada 3 años, un docente auxiliar puede ser despedido sin respetar sus antecedentes de buen desempeño. De este modo, por más que el docente lleve 10, 20, o incluso 30 años de actividad, ganando los sucesivos concursos, puede ser despedido sin indemnización alguna (como si nunca hubiese trabajado para la Facultad).
Como se observa el “progresismo de Exactas” somete a los docentes a un régimen laboral que, como si estuviésemos a principio del siglo XX, viola los derechos básicos de cualquier trabajador, esto es: “el derecho a un trabajo digno y estable”.
Las autoridades de la FCEN-UBA aplican la política del Tero: “cantan por un lado” para “poner los huevos los huevos por otro”, ya que la mayoría de las autoridades y profesores del oficialismo pertenecen a la carrera de investigador del CONICET, en la cual gozan de un régimen laboral que reconoce y garantiza los derechos laborales básicos en función del desempeño individual: estabilidad laboral, promoción en función del desempeño, y despido con indemnización. Mientras que, por otro lado, someten a la mayoría de los docentes de la FCEN a un régimen laboral injusto que no incluye ninguno de los logros conseguidos por los trabajadores durante el siglo XX y en lo que va del siglo XXI.
Consideramos que en forma urgente se deberían incorporar al régimen laboral de los docentes auxiliares de la FCEN-UBA los derechos a la “estabilidad laboral en función del buen desempeño del docente”, “promoción a categorías superiores en función de las tareas realizadas en el cargo y sus propios antecedentes” e “indemnización en caso de despidos sin causa justificada”. Creemos que ya es hora de abandonar el argumento liberal que sostiene que la precariedad laboral genera excelencia, el cual sustenta nuestro benemérito sistema de ‘concursos periódicos y abiertos’.
Resulta inadmisible que en el siglo XXI estos derechos no sean tenidos en cuenta en el régimen laboral de los docentes auxiliares de la FCEN, más aún cuando las autoridades de la misma pretenden ser consideradas ‘progresistas’.